10 de mayo de 2011

A mi Madre

Es bien sabido que para los Mexicanos, rara vez existe algo tan importante y tan valioso como lo es una Madre.
Es por eso, tal vez, que las ofensas mas fuertes que se dicen en México incluyen a la madre del que se busca ofender ("chinga tu madre", "Hijo de perra", "Hijo de la chingada", "Tu perra madre", entre muchas, MUCHAS más).
Y esque la verdad con justa razón tenemos a las madres en una posición tan alta, a fin de cuentas, ¿Quién de nosotros sería capaz de cargar con un bebé 9 meses en su propio cuerpo? ¿Dejar todos los malos hábitos para que nazca sano y fuerte? o tal vez.. ¿Quién de nosotros aguantaría sin respingar a los latosos chamacos que tiene por hijos?
Solo una madre puede.
Es por eso que, a pesar de que todos los días amamos a nuestras madres, y todos los días es un día que tenemos que honrarlas, se eligió un día todavía más especial, donde nos juntemos para decirles: "Gracias".

Y yo no quiero perder dicha ocasión.
Verán, mi madre siempre fue, y sigue siendo, uno de los ejemplos mas fuertes que ha impactado mi vida.
Ella representa para mi la viva imagen del autosacrificio, de la perseverancia, y de la constante lucha que es vivir.

Mi madre ha pasado por dificultades impresionantes en su vida, y ha superado obstáculos que parecieran imposibles, y siempre se ha mantenido de pie, dándonos a nosotros, sus hijos, un hombro sobre el que apoyarnos constantemente.

En mis 20 años de vida, me ha tocado ver como mi madre se aleja de quien la ha lastimado, me ha tocado ver como se tiene que despedir de su esposo cada cierto tiempo, esperando verlo volver con bien después de algunos meses (mi padre fue marino), me ha tocado ver como tiene que cumplir con los papeles de madre y de padre al mismo tiempo, me ha tocado verla luchar INCANSABLEMENTE al lado de mi padre en los últimos días de él, transmitiendole su propia fuerza, y cuidándolo mejor que cualquier doctor o enfermera.

La vi permanecer al lado de mi padre en su última semana, sin despegarse de él bajo ninguna circunstancia, hasta que él expiró.
También la vi llenarse de tristeza, y la vi llorar, solo para ver como se levantaba y luchaba para que nosotros pudiéramos aguantar, y no solo eso, para que pudieramos continuar con nuestros estudios y, en general, con nuestra vida como si NADA hubiera pasado.
Y a pesar de que durante las noches la tristeza la invadía, durante el día era la persona más fuerte que hubiera podido ver, y nunca la vi flaquear o rendirse, NUNCA.

Es por eso que hoy, en el día especial dedicado a ella y a todas las madres, quiero que sepa lo importante que es para mí, que sepa que forma parte importante de mi vida, que sepa que soy quién soy gracias a ella (y a mi padre), que gracias a su fortaleza yo sigo aquí de pie, que sepa que doy gracias porque ha compartido todos mis logros conmigo,  y que sepa que la amo de sobremanera.

No me queda hoy otra que decirle a mi madre, salvo el más sincero, grande y merecido
"Gracias Mamá, Te Amo"
que cualquier hombre ha podido articular.



Tyr